Lo primero que debes saber para lograr el mejor pollo guisado es qué partes del pollo tienes que usar para un guiso. No, no todas sirven por igual. Si compras el pollo entero, quédate con los muslos y los contramuslos para el guiso porque son mucho más jugosos y más uniformes para la cocción. Las pechugas déjalas y guárdalas para otras recetas como rebozadas o para hacerlas a la plancha.
¡Bien!, solventada esta duda, pasemos al momento en que lo cocinamos. Acuérdate de dorar bien el pollo al principio. Cuanto más lo dores por todos los lados, más sabroso te quedará. Después, durante la preparación, tienes que tener en cuenta que un cítrico va a ayudar a hacer más ligera la receta. Échale un chorrito de limón para quitarle grasa y así hacemos un plato mucho más ligero que te sentará de maravilla.
¿Más trucos para el mejor pollo guisado? Hablemos de cuánto caldo debes añadir. El caldo que apenas cubra pollo, esa es la medida. Y, por supuesto, la cocción siempre tapada porque los sabores y los olores se concentran más. ¡Y lo queremos todo perfecto!
Como último consejito, te vamos a dar la clave para sacarle jugo a las patatas que añadir a tu guiso. Las patatas te recomendamos que las chasques, algo que consiste básicamente en una técnica de corte superfácil. Empiezas cortando con el cuchillo pero terminas haciendo palanca para romper el último trozo. Así lograrás que quede un corte irregular que suelte el propio almidón de la patata, perfecto para que el guiso nos quede más espeso.
Es más, si ves que al final el guiso aún te ha quedado demasiado caldoso, lo que tienes que hacer es coger algunos trozos de patatas y aplastarlas con un poquitito de caldo de guiso. Después, lo devuelves todo a la olla. ¡Solucionado!
¿Y qué recetas aprovechando estos trucos para el mejor pollo guisado? Te va a encantar esta receta de pollo guisado con patatas perfecta para levantar el ánimo a cualquiera y también te sugerimos variación que es pollo con patatas guisadas que lleva jamoncitos con patatas guisadas, tiernos, sabrosos y muy muy sanos para convencerte, por si no lo estabas ya, de lo versátil que es la carne de pollo. De hecho, es que se entiende perfectamente que sea una de las carnes más consumidas en las casas: porque es fácil de elaborar, económico y bien bien sabroso. ¡Disfrútalo!