Sorbete de limón al cava

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  • < de 10 min
  • Fácil
  • 4 personas

El sorbete de limón al cava es el colofón ideal para terminar una comida copiosa. Es muy refrescante y, además, nos ayuda a hacer la digestión. Puedes servirlo de postre, como alternativa a la tarta, o incluso ofrecerlo tras el café, para entretener un poco el paladar mientras disfrutáis de una larga sobremesa. Pero las posibilidades del sorbete de limón al cava no acaban ahí. Hay quien lo sirve como aperitivo, a modo de cóctel, y también resulta excelente para separar platos de carne y pescado. Tomando un poco de este sorbete, limpiaremos el paladar y podremos apreciar al máximo los dos platos. Anímate a prepararlo la próxima vez que tengas invitados. ¡Seguro que les encanta!

Dulce, refrescante y digestivo

El limón, y los cítricos en general, son excelentes aliados para nuestra salud. Por su altísimo contenido en vitamina C, nos ayudan a combatir enfermedades, como los típicos resfriados y gripes de invierno, a la vez que refuerzan nuestro sistema inmunológico, por lo que son buenísimos para mantener el buen tono vital. También son muy ricos en ácido cítrico, un excelente antioxidante con propiedades depurativas, desinfectantes y microbicidas. Además, el ácido cítrico nos ayuda a eliminar las toxinas que nuestro organismo no metaboliza y que se van acumulando sobre diferentes órganos.

Ya lo ves, el limón es una auténtica joya, así que vale la pena que lo tengas en cuenta y lo incluyas en tu dieta. ¿Te gusta su sabor ácido? A mucha gente le encanta, pero también hay quien prefiere neutralizarlo un poco. Los sorbetes o helados de limón que encontramos en el supermercado normalmente no son demasiado ácidos, pero si optas por preparar el sorbete en casa quizás te interese rebajar un poco el grado de acidez. Para lograrlo, prueba a mezclar el zumo de limón con un poco de zumo de naranja.

Y, si todavía lo quieres más dulce o cremoso, añádele un poco de leche condensada, un yogur batido o un poco de nata líquida.

 

Mezcla de sabores

Sin duda, el sorbete de limón es la estrella entre los helados que se pueden preparar con cítricos. Pero lo cierto es que los sorbetes también quedan riquísimos si los preparamos con otras frutas de la misma familia, como naranja, mandarina, lima o pomelo. ¿Por qué no te animas a probarlos? Hacer un sorbete casero de naranja es facilísimo. Para prepararlo, sólo necesitarás naranjas, agua y azúcar. Prepara unos 500 ml de zumo de naranja. Vierte 200 ml en un cazo, ponlo a calentar a fuego medio y añade 3 cucharadas de azúcar. Remueve hasta que se integren los dos ingredientes, retira del fuego y deja que se temple. Añade esta mezcla al zumo de naranja restante, remueve y prueba el sabor. Si crees que necesita un punto más dulzón, puedes repetir de nuevo el paso anterior. Cuando esté en su punto, coloca la mezcla en un recipiente y déjala en el congelador durante al menos 2 horas, para que se solidifique. Antes de servir, rompe el zumo con un cuchillo y tritúralo con la batidora hasta que quede una crema de textura suave y sin trozos de zumo congelado.

A la hora de servir el sorbete de limón al cava, puedes presentarlo directamente en copas o llevarlo a la mesa en una jarra bonita para que comensal se sirva la cantidad que desee.

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Consejos para cocinar Sorbete de limón al cava

El Truco: ¡aprovecha la piel del limón!En las pieles de frutas y verduras se encuentran numerosas sustancias beneficiosas para nuestro organismo y en algunos casos aceites esenciales aromáticos, como en el caso del limón o la naranja que podemos usar en infusiones, guisos o postres. Además, nos pueden servir para decorar platos.  

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