Salteado de espárragos verdes y alcachofas con foie
- 10-20 min
- Media
- 4 personas
Sin duda uno de los productos con más elegancia de la gastronomía francesa y que se ha extendido a muchas otras partes del mundo es el foie gras. Muy apreciado para los gourmets, el foie va más allá que un paté, ya que no lo es, de hecho es a partir del foie que se hace el paté. Esta delicia culinaria lleva con nosotros desde la antigüedad y si la incluyes en cualquier plato ten por seguro que triunfarás entre tus invitados.
Hoy te recomendamos cocinarlo en este fantástico salteado de espárragos verdes y alcachofas con foie. Un plato 100% apetitoso y sobre todo, muy rápido y sencillo, con el que enamorar a tus comensales.
El foie es tan exquisito que no le hacen falta muchos ingredientes para degustarlo. Si la receta de hoy te ha gustado espera a probar la de foie de pato salteado con salsa de casis, servido con unos brotes de espinacas y puré de manzana.
Ingredientes para Salteado de espárragos verdes y alcachofas con foie
Cómo hacer Salteado de espárragos verdes y alcachofas con foie
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Sofríe la cebolla y el pimiento rojo cortados a tiras finas en un poco de aceite, sazona con una mitad de la pastilla de Avecrem, hasta que estén bien concentrados y reserva. Saltea los espárragos pelados de la parte inferior y las alcachofas peladas y cortadas a cuartos en un poco de aceite, sazona con la otra ½ pastilla de Avecrem. Reserva también.
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En una sartén antiadherente, pon un poco de sal y, cuando esté bien caliente, pon el foie. Márcalo vuelta y vuelta para que quede tostado por fuera y caliente por dentro. Monta el plato con una base de alcachofas, el foie y los espárragos. Por encima, pon la cebolla y el pimiento.
Consejos para cocinar Salteado de espárragos verdes y alcachofas con foie
El Truco: mantén las alcachofas apetecibles
Las alcachofas están deliciosas pero un problema que tienen es que se ponen negras en seguida y eso no gusta a nadie. ¿La solución? Pues tan sencillo como ponerlas en remojo con agua una vez peladas. Deberás añadir también al líquido zumo de limón o troncos de perejil rotos. De esta manera, la vitamina C del limón o la A del perejil evitarán que se oxide la alcachofa y que se ponga negra.