Bacalao con salsa holandesa
- < de 10 min
- Media
- 4 personas
Información nutricional
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Energía
810kcal
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Hidratos
24.94g
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Proteínas
41.28g
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Grasas
59.70g
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Fibra
3.72g
La salsa holandesa es una mezcla emulsionada de mantequilla, zumo de limón y yemas de huevos que se sirve tanto en patatas, verduras y, como en la receta que te mostramos, en pescado.
Este plato de bacalao es una receta muy original y sabrosa que prepararás muy rápidamente. La elaboración de la salsa holandesa requiere bastante atención, pues es fácil que se corte, pero si sigues paso a paso la receta, no tendrás ningún problema. Anímate a preparar esta deliciosa receta y a sorprender a tus invitados. ¡Te aseguramos que está para chuparse los dedos!
Si quieres preparar el bacalao de una forma distinta te proponemos estos
Ingredientes para Bacalao con salsa holandesa
Cómo hacer Bacalao con salsa holandesa
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Pon la mantequilla en un cazo al fuego para que se derrita. Una vez líquida, cuélala con cuidado, para quedarte sólo con el aceite (la parte de color amarillo) y separar el suero (la parte blanca).
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Para hacer la salsa holandesa, echa en un cuenco las dos yemas de huevo y el zumo de limón.
Bate con la ayuda de unas varillas hasta que veas que empieza a montar un poco. Vierte muy despacio la mantequilla, sin parar de batir hasta que veas que espesa y se va ligando la salsa. -
Parte las patatas por la mitad, añade una pizca de sal y de pimienta, un chorrito de aceite de oliva y la pastilla de Avecrem Pescado -30% de Sal desmenuzada.
Cuécelas en el horno a 180 ºC hasta que estén tiernas.
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Corta el bacalao en trozos de 200 g. Fríe los ajos chafados con la piel y el bacalao en este aceite por los dos lados.
Consejos para cocinar Bacalao con salsa holandesa
El Truco: la salsa holandesa perfecta
Cuando prepares la salsa holandesa, ten cuidado que no se te corte. Si se te corta, no te preocupes, ¡te damos una solución! Si solo se te ha cortado un poco, añade bátela de nuevo añadiendo una cucharada de agua tibia, así la ligarás otra vez. Pero si se te ha cortado bastante, bate una yema con unas gotas de agua en un cuenco y, cuando a montar, mézclalo con el resto de la salsa. Así conseguirás una salsa perfecta.